domingo, 5 de abril de 2015

PD: Esto no es un adiós

Hola a todos.
Sé que este blog fue abandonado hace un tiempo y realmente lo siento, pero tengo una excusa buena: y es que estaba ocupada reorganizando mi vida. Este año hubo muchos cambios y he madurado. Este blog lo cree como dos o tres años atrás y he publicado cosas que - ahora me doy cuenta - no me importaban realmente. Se suponía que era un blog personal, un lugar donde publicar lo que se antojase, no solo aquello para atraer a más visitantes. Es verdad que era una chica algo común: los mismos gustos, el mismo estilo, el mismo blog que otros cien millones más en todo el mundo.
Esta no pretende ser mi última publicación porque aún recuerdo cómo empezó todo, y supongo que si recuerdas el motivo por el que algo fue iniciado debería darme motivo suficiente par continuarlo. Han pasado muchas cosas des de que lo emepecé y no me arrepiento de ninguna de ellas. Solo que a veces, siento que me falta algo más. Vivir esa historia que inspira a escritores. Ser su musa del romanticismo. Y aunque sé que esto no va a ser posible porque no vivo en ningún libro, ni película, ni nada por el estilo, quiero hacerlo, quiero vivir y experimentar, y escribir. Mucho. Escribir todo lo que piense, lo que se me ocurra.
Y si os digo la verdad, después de meses sin inspiración, he vuelto a empezar a redactar una nueva historia y os lo cuento a vosotros. Me da igual que este blog tenga diez visitantes como si solo tenga uno. Me da igual que a la gente solo le interese el blog por los libros para descargar, ¡yo también lo hago! ¿Quién no lo hace? El hecho es que no me importa si nadie nunca ve esta entrada, si nadie nunca la lee. Yo la habré publicado y la abré dejado en la red, flotando, esperando a que algún desafortunado encuentré este blog medio abandonado y la lea. Y cuando eso ocurra sabré que habrá valido la pena escribir esto a la 1:33 de la madrugada, después de ir al cine un 5 de abril de 2015.

Gracias por todo.

PD: Esto no es un adiós.